La inmensidad de África y qué diferencias de zonas hay
Viajar a vez a África. Por dónde empezar y cómo entender el continente más fascinante del planeta

Si estás pensando en viajar por primera vez a África, prepárate para enamorarte… y para no volver a mirar el mundo con los mismos ojos. África es un continente inmenso y tiene zonas muy diferentes, por eso, entenderlo un poco antes de lanzarte a explorarlo te permitirá elegir bien tu destino.
Primero: entender el mapa de África. África se divide oficialmente en cinco grandes regiones:
- África del Norte: Marruecos, Egipto, Túnez... donde el desierto del Sahara y la herencia árabe te envuelven en una atmósfera mística. Es la zona donde ir para conocer toda la parte más cultural, monumentos, escenarios épicos...
- África Occidental: Senegal, Ghana, Costa de Marfil... el corazón cultural del continente, lleno de ritmo, mercados, y una energía contagiosa. Esta zona esta menos explotada turísticamente que el norte, pero es mejor ir con un viaje organizado por expertos para ir con total seguridad.
- África Central: Camerún, Gabón, Congo... más salvaje y menos turística, pero con selvas y fauna que parecen salidas de un documental de National Geographic. Nosotros recomendamos ir a esta zona cuando ya seas un viajero experimentado en África, hay que ir con todo preparado, organizado y sabiendo a dónde vas.
- África Oriental: Kenia, Tanzania, Uganda... el África de los safaris, los amaneceres en la sabana y las playas blancas de Zanzíbar. Es la zona donde más safaris típicamente se han hecho, una buenísima opción para descubrir el mundo africano tal y como te lo imaginas.
- África Austral: Sudáfrica, Namibia, Botsuana, Zambia... una mezcla perfecta entre naturaleza, aventura y sofisticación. Es perfecto para conocer a fondo el continente, dejarte asombrar y recorrer playas y zonas que no esperas ver en África.
Cada zona tiene su propio pulso, su propia historia y una manera distinta de entender la vida.
Por dónde empezar si es tu primer viaje
Si es tu primera vez, lo ideal es empezar por zonas donde el turismo está más desarrollado, la infraestructura es buena y los contrastes son más amables. Aquí van tres rutas perfectas para iniciarte:
El norte: Marruecos o Egipto
Son puertas de entrada al continente. Marruecos te recibe con zocos, riads y desiertos que parecen de película. Egipto, con su historia milenaria y el Nilo como columna vertebral, te sumerge en una civilización que sigue viva. Son destinos seguros, con buena conectividad y una mezcla de cultura árabe y africana muy accesible.
El este: Kenia o Tanzania
Aquí empieza el sueño africano de verdad. Safaris, tribus masai, el Kilimanjaro al fondo y las playas de Zanzíbar al final del viaje. Son países acostumbrados al turismo internacional, con alojamientos espectaculares y naturaleza que sobrecoge. Perfectos si buscas ese “África de documental”.
El sur: Sudáfrica o Namibia
Más modernos, más organizados, pero sin perder autenticidad. En Sudáfrica puedes pasar del bullicio urbano de Ciudad del Cabo al Parque Kruger en pocas horas. Namibia, en cambio, es puro silencio: dunas infinitas, desiertos naranjas y cielos que parecen de otro planeta.
Consejos para una primera experiencia africana:
- Empieza con un solo país o dos, no con diez.
- Elige bien la época del año. Evita lluvias intensas y busca la temporada seca (entre junio y octubre en el este y sur).
- Contrata el viaje a profesionales. No solo facilitan el viaje: te enseñan el alma del lugar sin ningún tipo de preocupación y riesgo.
- Viaja con respeto. En África la sonrisa es la mejor moneda de cambio.
- Déjate llevar. No todo saldrá como planeas, pero todo saldrá mejor de lo que imaginas.
Y sí, una vez que pises África, siempre querrás volver.



